Intentando reinventarse y superarse Masters Ballet consigue nuevamente seducir y sorprender regresando en esta ocasión a África a para evocar la esencia y la siempre exótica belleza del continente africano.
Con este colorido ballet se intenta mantener intacta la esencia del arte africano, sus colores, sus formas, su sencillez y su ausencia de elementos meramente decorativos se ponen de acuerdo para dibujar un paisaje lúdico y fascinante para transmitir el placer y la alegría de vivir de los integrantes de esta danza.
Las raíces de estos bailes ancestrales siguen manteniéndose intactas en nuestros días, lejos de la modernización y el desarrollo y esto es algo que desde el Ballet Masters hemos intentado respetar.
Todos los aspectos plásticos son diseños originales del Ballet Masters, 30 máscaras únicas y originales que portan 30 bailarinas han sido diseñadas expresamente, así como la coreografía, inspirada en las danzas tradicionales de Burundi y la música, compuesta por el grupo de percusión Baketa para esta ocasión.
El motor del ballet radica en la saturación de colores robados a la naturaleza, tantos en sus máscaras como en sus ropajes, faldas cosidas y montadas siguiendo el rudimentario sistema africano de acumulación de capas, tejidos y estampados que aportan sencillez y veracidad a la propuesta.
Las máscaras, además de ser elementos de gran belleza ornamental son símbolo de protección espiritual, con una fuerte carga religiosa que presume de ahuyentar a los espíritus de los antepasados y las almas perdidas.
Posibilidad de contratar el numero de bailarinas que se adapte a la idea de boato o presupuesto.